Luego de revolucionar las redes sociales anunciando que estaba dispuesto a comprar Twitter y hacer todo lo posible para conseguirlo, el CEO de Tesla y SpaceX decidió retirar su oferta de compra el pasado viernes y la compañía tomó cartas en el asunto.
La demanda fue presentada este martes en el Tribunal de Cancillería de Delaware, con la intención de forzar a Elon Musk a cumplir con el acuerdo de compra, ya que, desde que se reveló que el multimillonario ya no estaba interesado en comprar la red social, la acciones no dejaron de bajar y el propio valor de la empresa se encontraba en juego.
«Musk aparentemente cree que él -a diferencia de cualquier otra parte sujeta a la ley de contratos de Delaware- es libre de cambiar de opinión, destrozar la empresa, interrumpir sus operaciones, destruir el valor de los accionistas y marcharse» señala la demanda.
Por su parte, el abogado de Musk alegó en una carta publicada el viernes al principal abogado de Twitter, que la plataforma está «en incumplimiento sustancial de múltiples disposiciones» del acuerdo, afirmando que la compañía retuvo los datos que Elon solicitó para evaluar la cantidad de bots y cuentas de spam.
El trato inicial acordado por ambas partes, era de 44.000 millones de dólares, el cual incluye una cláusula que establece una penalización de 1.000 millones en caso de que cualquiera de las partes decida retirarse.
De igual forma, Twitter no busca forzar a Elon Musk para que pague la cláusula, si no que quiere que siga adelante con la compra «para que Elon Musk responda a sus obligaciones contractuales», aseguró el presidente del consejo de administración de Twitter, Bret Taylor.
El magnate por su parte, no comentó demasiado sobre el asunto, pero no perdió la oportunidad de realizar un posteo en nada más y nada menos que Twitter, la red social que ya no es de su interés de compra. «Oh la ironía» publicó.
Oh the irony lol
— Elon Musk (@elonmusk) July 12, 2022